miércoles, 6 de septiembre de 2017

PENSAMIENTOS

                                             
                                               
                                       
                                                 Hace ya cinco meses que escribiera,
soñando un día, descubrir mi herida,
sonetos a  “UNA VOZ”, muy conocida,
que marcó mi destino, en tal manera,
que me puse a subir por la escalera,
de un pasado remoto de mi vida.
   La brecha estaba abierta y encendida,
más allá del dolor que me invadiera.
   Descargando sonetos prisioneros,
de un modesto Internet, que no entendía,
me quedé sin amor y compañeros,
tan solo mi dolor en compañía,
no quise descubrir nuevos senderos,
por no tener que abrir un nuevo día.


    Lloraba entre mis versos torpemente,
buscando en el ayer una esperanza,
tal vez una ilusión en lontananza,
y una luz en mi cielo, intermitente.
    Y pasaban los días lentamente,
y las noches llegaban sin tardanza,
y mi amor se ocultaba en la confianza,
lejano a este sufrir constantemente.
    Si pudiera borrar de mi memoria,
el cariño, el amor y la pasión,
volvería a escribir la misma historia,
preñada de ambiciones e ilusión,
sentado en el umbral de aquella euforia,
volando sin cesar mi corazón.


   Yo no puedo vivir para olvidar,
yo no sé recordar sin padecer,
parece que es tan fácil de entender,
que resulta imposible descifrar.
   Cada cual es un mundo al caminar,
por la senda bendita del querer,
que empieza por un bello amanecer,
y que nunca parece terminar.
    Pero todo se acaba en esta vida
porque nada hay eterno en su arrogancia,
el sueño y la ilusión, tal vez dormida,
se ocultan sin querer en la distancia,
que media entre el ayer de amanecida,
y el hoy de la ambición y tolerancia.


                       O.Z.M.




4 comentarios:

  1. Cuanto tiempo sin tener noticias tuyas. Me alegro mucho de volver a leer tus sonetos y espero seguir leyendolos mucho tiempo más . Un abrazo .

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  2. Olegario, no me lo puedo creer. Publicas de nuevo después de tanto tiempo en silencio. Como me alegro de volver a leer tus sonetos. Por si no te acuerdas de mi, soy Nerim, de cajón secreto, que ahora con nuevo libro de relatos publicado con mi nombre completo, tengo otro blog llamado "dos libros de relatos" aunque sigo manteniendo el de cajón secreto. Envíame un correo, supongo que conservas mi dirección. Me gustaría mucho saber como te va la vida. Me has dado una alegría publicando de nuevo. Un fuerte, fortísimo abrazo y mi cariño.

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  3. Enhorabuena, Olegario, toda una sorpresa. Cuando alguien se aparta nunca sabemos si es un acto voluntario o impedimentos de fuerza mayor. Celebro que estés aquí de nuevo, pues es una fiesta para la palabra poética.

    Un abrazo.

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  4. Bienvenido de nuevo, Olegario. Es una satisfacción volver a leer tus sonetos. Te incluyo de nuevo como recomendado en mi sidebar de la que te había eliminado por el tiempo transcurrido sin publicar. Un fuerte abrazo.

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